Fuego
Allá donde es fuego tu cuello,
ese que mi lengua aplaca en un instante
avivándolo al siguiente,
donde el tiempo se concentra y eterniza
en un aroma, una caricia,
la canción de tus gemidos,
en el universo de tu piel y de la mía,
seca la garganta de deseo
en ansia continua de tus besos,
allá donde nunca te he perdido,
me elevo entre tus sueños.
ese que mi lengua aplaca en un instante
avivándolo al siguiente,
donde el tiempo se concentra y eterniza
en un aroma, una caricia,
la canción de tus gemidos,
en el universo de tu piel y de la mía,
seca la garganta de deseo
en ansia continua de tus besos,
allá donde nunca te he perdido,
me elevo entre tus sueños.