Como hablar de la belleza y la emoción,
fugitivo sol naranja granate sobre la tierra,
hojas caídas que devuelven su luz, tu luz,
reverberando en el fondo de tus ojos,
soledad disuelta, fundida en el todo.
Como no sentir que la fuerza se te escapa
abierta ventana poro a poro,
corriendo junto a la vida que te envuelve,
ese sordo rumor que te llama y te hace suyo
devolviéndote a tu ser antes de que la noche caiga.
Rompe entonces esa música, ¿recuerdas?, toda defensa
iluminando la recobrada soledad azul profundo
de tus horas recogidas,
surgiendo de nuevo el estremecimiento de la belleza
frágil y poderosa de la vida.